Macarena Jaca Basti es vecina de Santa Teresita y su pequeño hijo atravesó una grave enfermedad como consecuencia de la picadura de una extraña garrapata. Tras recibir el tratamiento correspondiente en el Hospital Muñiz, Macarena contó su caso para que los vecinos estén alerta y se realicen los estudios correspondientes.
En diálogo con Costa de Noticias, relató: “El 9 de noviembre mi nene se despierta me dice que le duele la cabeza y lo reviso y tenía una pequeña garrapatita detrás de la oreja, se la saco incorrectamente porque se debe poner alcohol y esperar que se desprenda sola. La guardé porque las garrapatas transmiten enfermedades”.
“Unos días después mi nene empieza con dolor en el cuello y con fiebre. Luego tiene rigidez en el cuello y ganglios inflamados. La pediatra me da un antibiótico, el nene sigue con fiebre. Cuando lo llevo al médico me dicen que es una garrapata común, que no tenga miedo, que siga con el antibiótico”, agregó.
“Me preocupo y mi mamá me contacta con Miguel Boschiasso que trabaja en Zoonosis y él se comunica con profesionales de Zoonosis dependiente del ministerio de Salud de la provincia porque mi nene estaba cada vez peor. Me comunico con estos médicos que me hacen una serie de preguntas. Les envío la foto y me dicen que no es una garrapata común, sino que es de animal salvaje y que transmite varias enfermedades, una de las cuales se llama fiebre manchada de las montañas rocosas que puede traer problemas articulares, renales, cardíacos hasta provocar la muerte o secuelas y enfermedad crónica”, señaló.
“Unos minutos después me dicen que el 18 de noviembre tengo que ir al Hospital Muñiz y presentarme en la parte de zoopatología. Me recibieron un grupo de médicos, le hacen todos los exámenes correspondientes, una biopsia. Llevé la garrapata para los estudios de ADN y patológicos, mi hijo es diagnosticado clínicamente con fiebre manchada. Agarrada a tiempo la enfermedad se cura con un antibiótico específico, inmediatamente empezamos con el tratamiento de 5 días”.
Tras regresar a Santa Teresita “en tres semanas nos dieron los resultados que confirmaron la enfermedad. Gracias a Dios mi hijo fue agarrado a tiempo, acá no hubo diagnóstico y sería importante que estas cosas se difundan. Durante el tiempo que estuvimos esperando resultados al día de hoy, los médicos de Zoonosis de la Provincia como del Hospital Muñiz estuvieron comunicándose conmigo cada dos días siguiendo el caso de mi hijo. Esta semana me mandaron para hacerle otros estudios sanguíneos para determinar algunos factores de la enfermedad”, apuntó.
Además, vino a La Costa Vanesa Defeis, Epidemióloga del Ministerio de Salud de la provincia para requerir que se haga un trabajo de campo acá, algo que no se hizo.