Ante la noticia del fallecimiento de una bebé de 18 meses por la picadura de una araña las autoridades sanitarias emitieron una serie de recomendaciones.
La pequeña era oriunda de Lincoln y murió en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de Junín luego de ser picada por la denominada “araña del rincón”.
En tanto, en los últimos 30 días hubo dos muertes por mordedura de araña del rincón (del género Loxosceles). En septiembre, había muerto un hombre de 52 años de La Plata.
Esta araña es una de las tres venenosas que habitan a lo largo del país y se esconde en general en lugares oscuros como detrás de muebles, cuadros y sillones.
Según explica el Ministerio de Salud de la Nación, la araña del rincón, conocida también como “araña violín”, es muy pequeña (tres centímetros), de color marrón y tiene hábitos lucífugos (huye de la luz), pero no es agresiva. Se puede identificar fácilmente por la similitud que posee su cefalotórax (la fusión de la cabeza con el tórax) con la forma de un violín.
En la Argentina existen tres arañas venenosas: Latrodectus Sp. (más conocida como viuda negra), Loxosceles Sp. (araña del rincón) y Phoneutria Sp. (araña del banano).
La viuda negra tiene hábitos rurales, mientras que la llamada “del rincón” vive en las casas y se mueve generalmente de noche.
EL CASO
La menor falleció en Junín producto de una picadura del arácnido que le generó una falla multiorgánica.
La niña sufrió la picadura el viernes 9 y si bien se le logró aplicar el suero el sábado al mediodía cuando fue trasladada al nosocomio de Junín, no logró resistir el envenenamiento y murió por la noche.
“Todo comenzó cuando la madre de la niña consultó a la guardia pediátrica ya que su hija lloraba y lloraba, la pediatra que estaba de guardia en ese momento la examinó, buscó las causas de ese llanto, no encontró nada en ese examen físico y le administró un analgésico, paracetamol, luego volvió a su casa”, explicó hoy al canal de noticias TN el secretario de Salud de Lincoln, Jorge González.
Agregó que alrededor de las 5 de la madrugada del día siguiente, la mamá volvió al hospital ya que la niña seguía con mucho llanto y con una hinchazón en la zona del mentón y parte superior del tórax, por lo que decidieron una radiografía y un análisis de laboratorio. Los resultados se los dieron recién a la mañana en donde se “evidenció de un proceso infeccioso importante”.
Según González, en la mañana esa “lesión de no tener aspecto de nada, ya tenía aspecto azulado en esa zona inflamada, que por la evolución si parecía tratarse de una picadura”.
Rápidamente, el equipo médico se comunicó con el Centro Provincial de Toxicología del Hospital Sor María Ludovica de La Plata, que derivó el caso al Cetroprox quienes sugirieron que se trataba de un cuadro de Loxoscelismo (manifestaciones clínicas ocasionadas por el envenenamiento causado por la picadura de araña de género Loxosceles).
Pese a que fue enviado el suero, y se concretó la posterior internación en el hospital de Junín, la niña murió horas después.