El Gobierno nacional, a través de la ANSES, oficializó este lunes un aumento del 3,47% para los haberes jubilatorios, en línea con el índice de inflación de septiembre, que dio a conocer el Indec.
Con el reajuste, la jubilación mínima del sistema general de la Anses subirá de $244.320,56 a $252.798,48 y la máxima, de $1.644.046,07 a $1.701.094,47 según los valores en bruto. El importe de la Prestación Básica Universal (PBU) será de $115.643,76, mientras que los beneficiarios de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) cobrarán $202.238,78. Las bases imponibles mínima y máxima fueron fijadas en $85.142,48 y $2.767.090,68, respectivamente, a partir del período devengado noviembre de 2024.
Asimismo, se estableció que a partir de noviembre el importe de la Prestación Básica Universal (PBU) será de $115.643,76, mientras que la Pensión Universal al Adulto Mayor (PUAM) llegará a $202.238,78.
El aumento según la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) alcanza a quienes cobran jubilaciones y pensiones del sistema contributivo de la Anses y a quienes perciben pensiones no contributivas o prestaciones por hijo, ya sea la Asignación Universal por Hijo (AUH), cobrada por trabajadores informales y desocupados, o la asignación del salario familiar de la economía formal, que alcanza a un grupo de empleados formales y de monotributistas.
Asimismo, el titular de la Anses, Mariano de los Heros, anunció la semana pasada que si bien el bono de $70.000 se seguirá pagando, estará congelado en ese monto durante todo 2025.