La denuncia fue radicada en la Comisaría II de Mar de Ajó y ratificada en la Juzgado de Paz a cargo del Dr. Sergio Eduardo Magioli.
En contacto telefónico con Costa de Noticias, la mujer de iniciales A. S. B. narró que el domingo a la noche el hombre D. A. G. «me había tirado por las escaleras (entonces) yo salí afuera a pedir ayuda y justo pasó un auto que paró, le pedí que llamara a la policía (pero) él se metió en el medio y le dice al chico, no te metas que es un problema de pareja«.
Pero la agresión, detalló Antonella no terminó ahí. «Después se fue, volvió como a las seis de la mañana diciendo que había hecho una denuncia como que yo lo había agredido. Viene, junta sus cosas y se quiere ir y cuando yo le pedí que me deje plata porque no tenía plata para darle de comer a mi hija, me tira 100 pesos, sale y cuando yo quiero cerrar la puerta me empuja, me agarra de la campera y me da una patada y me dice «bueno, ahora andate»«.
En ese momento, «busco una remera y cuando salí me agarra de los pelos y me arrastra por el piso. Cuando yo me quiero levantar, él me vuelve a empujar, me levantó de la remera y me mira, me agarra el brazo, me ve un moretón y cuando me lo ve me pisa el tobillo. Ahí me vuelve a empujar y toma distancia como queriendo pegarme una patada en la cabeza«.
Para ese entonces, unos vecinos de la pareja domiciliada en la calle Castelli de Mar de Ajó la asistieron e ingresaron a su casa lo que permitió que, finalmente, llame al 911.
En la ratificación que realizó ante el Juzgado el lunes 5 de octubre, consta que «durante toda la relación, por razones de celos, el denunciado ha actuado de manera de que la dicente quede incomunicada con su entorno social, privándola de comunicación telefónica» y, además, éste «ha amenazado tanto a ella como a toda su familia».
Por tal motivo, la Justicia determinó que el hombre llamado Diego no podría acercarse «a menos de 200 metros por el termino de 90 días» a ella o a cualquier familiar.
Antonella agregó que esta no es la primera denuncia que realiza ya que en 2013 había realizado otra porque la había «golpeado muy feo». Sin embargo, entonces -reconoce- «yo cometí el error de volver con él y después paso el tiempo y todo bien. Discutíamos verbalmente. Después, Hace un mes tomé la decisión de separarme por las discusiones. Cuando volvimos del abogado llegamos a la casa y él se puso agresivo. Me insultó verbalmente, me empujó y me pegó piñas en la cabeza».