El lugar donde se encontró a Lucas Sosa fue marcado por Ringo, el perro que halló a Santiago Maldonado, perteneciente al cuerpo de Bomberos Voluntarios de Pilar.
Luego de estar en el lugar el miércoles, la delegación de Pilar volvió el sábado y el labrador fue preparado durante algunos minutos. Se esperó que haya algo más de viento y se llamó a una lancha para trasladarlo de nuevo a esa “zona caliente”. Ya en el sitio, reaccionó con ladridos nuevamente y se dio aviso a otras embarcaciones.
Es poco el margen de error de esos canes porque son entrenados asiduamente para detectar diversos olores. “Él sabe que trabajamos con un premio y por eso reacciona. Hoy las condiciones era óptimas porque había mucho viento y eso agitaba el agua pero a su vez nos provocaba el problema que el olor se disipaba a más metros del lugar del hallazgo”, dijo Silva.
Sin embargo, su rango de detección fue de 20 metros. Se dieron varias vueltas por el sitio y siempre reaccionó. A los 20 minutos otra de las embarcaciones dio con algo en el fondo y se confirmó el resultado que dio fin a la búsqueda.
La carátula de la causa cambió de «Averiguación de paradero» a «Averiguación de causales de muerte».