Durante ese día, centenares de médicos oftalmólogos de todo el país atenderán a pacientes diabéticos en forma gratuita para detectar o descartar la presencia de retinopatía diabética, una enfermedad nociva para la salud visual que puede ser causal de ceguera. Por ello realizarán estudios de fondo de ojo, un examen rápido e indoloro que sirve para detectar ágilmente la presencia de esta patología.
Se considera necesario informar a la comunidad que la detección precoz de la enfermedad ocular permite realizar el tratamiento indicado y disminuir el porcentaje de pacientes que llegan a la ceguera por retinopatía diabética.
El oftalmólogo examina el fondo de ojo (retina, mácula y nervio óptico), generalmente recurriendo a la dilatación de las pupilas, lo que se logra mediante la aplicación de gotas. Es un proceso rápido e indoloro. Si se comprueba la presencia de retinopatía diabética, se pueden efectuar otros estudios para determinar si el caso requiere tratamiento.
Es importante la prevención ya que la diabetes es la segunda causa de ceguera en los países industrializados y la principal en personas de 25 a 74 años. En la Argentina hay alrededor de 1.500.000 diabéticos (entre el cuatro y cinco por ciento de la población), de los cuales la mitad ignora que padece esta enfermedad. Casi todos ellos desarrollarán algún grado de retinopatía diabética a lo largo de su vida.