El responsable del área de Zoonosis de la Municipalidad, Miguel Ángel Corti, destacó que «la presencia de ofidios en ciertas zonas es normal, aunque las circunstancias de la caída de abundante lluvia en los últimos meses llevó a un aumento del nivel de agua, lo que produce que estos animales busquen zonas más altas para su refugio».
Si bien las víboras de la zona no suelen ser venenosas, e especialista recomendó que «en caso de un accidente se debe concurrir inmediatamente al Hospital para que el equipo de médicos atienda el caso y considere si es necesaria la aplicación del suero antiofídico que tenemos», agregó Corti, quien aconsejó no tratar de capturar al animal.
Asimismo, el responsable de Zoonosis explicó que «las yararás y las falsas yararás que habitan en la zona son fauna autóctona y cumplen un rol importante en control de especies de roedores que pueden transmitir otras enfermedades».
Los cuidados principales son el uso de ropa adecuada, especialmente para los que practican deportes en zonas alejadas y también para aquellos que hagan movimientos de escombros, tierra o maderas con mucho tiempo de estar fijas en un lugar, ya que son los refugios más buscados por los ofidios.