Con la participación de unas 400 personas y la destacada presencia de Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo, los jóvenes explicaron que General Lavalle es una pieza fundamental para comprender la historia de la última dictadura militar ya que «cierra el circuito del plan sistemático de desaparición de personas».
«El cementerio de General Lavalle fue, como otros, el destino último que encontraron muchas víctimas del terrorismo de estado durante la última dictadura militar. Los cuerpos de los detenidos que fueron arrojados al mar en los vuelos de la muerte aparecieron, un tiempo después, en la costas como las de Santa Teresita. Todos ellos fueron enterrados como NN», detallaron.
En este lugar, hasta el momento, se encontraron «33 cadáveres de los cuales 19 ya han sido identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense, entre ellos se encuentran Azucena Villaflor y Leonnie Duquet».
Además de reconocer el lugar como sitio de la memoria, la iniciativa dispone tareas de preservación para seguir realizando investigaciones que permitan nuevos hallazgos e identificaciones. Además, impulsa la creación de un área de Derechos Humanos dentro del municipio para gestionar el espacio y promover actividades.