La propuesta de señalizar el cementerio se consolidó en una Sesión Especial del Concejo Deliberante realizada en septiembre, donde el grupo de estudiantes y docentes de la Escuela presentó el proyecto de ordenanza a través de la Banca Pública, que se usó entonces primera vez en el HCD local.
El profesor Maximiliano De Luca explicó el nacimiento de este proyecto de manos de los alumnos de escuela EEMM N°1 Manuel Belgrano, recordando que el mismo lleva casi 6 años de investigación y estudio de los hechos ocurridos en esa oscura época del país, y resaltó el apoyo de la Municipalidad y de toda la comunidad Lavallense.
Junto al intendente, José Rodríguez Ponte, y al vicegobernador, Daniel Salvador, el secretario de Derechos Humanos bonaerense, Santiago Canton, aseguró que “la construcción permanente de la memoria es una garantía para evitar que las graves violaciones a los derechos humanos que sufrimos todos los argentinos no se vuelvan a repetir. Es una obligación del Estado asegurar el avance contante en la búsqueda por mantener la memoria viva para garantizar el Estado de Derecho”.
En el cementerio de General Lavalle fueron enterrados sin nombre los restos de militantes políticos, sociales y sindicales detenidos-desaparecidos por el terrorismo de Estado, tras haber sido víctimas de los “vuelos de la muerte”, y luego de que sus cuerpos se hallaran en las costas del mar Argentino durante los años 1977 y 1978.
Entre fines de 2004 y principios de 2005, el Equipo Argentino de Antropología Forense llevó adelante un trabajo de exhumación en el lugar, hallando una fosa común con 33 cadáveres, de los cuales se logró determinar la identidad de 18 personas. Entre los restos identificados, se encontraron los de Azucena Villaflor, una de las fundadoras de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, y los de la religiosa francesa, Léonie Duquet.