Marilina Zabalo es voluntaria en el Hogar Nomadelfia de Berazategui y cuando consultó a los niños qué sueño querían cumplir le respondieron que querían conocer el mar.
A partir de ahí empezó una cadena solidaria que permitió conseguir alojamiento en la Fundación Betel de Las Toninas, entradas para Mundo Marino y una noche de juegos en Le Park de Costa del Este. Los comerciantes toninenses también hicieron lo suyo, preparando con antelación las comidas necesarias para todos los niños y las 10 voluntarias, incluyendo a la Pizzería Pascual, que invitó a todo el contingente a comer en su restaurante.
En diálogo con FM La Marea, Zabalo contó cómo fue el momento en el que los niños de entre 1 y 15 años, se encontraron con el mar: “Primero las caras, desde el micro, que ya lo vimos, todos gritaban a la vez. Al llegar salieron los 45 corriendo. La verdad que nos tocó un día divino, pero hacía frío y todos igual se metieron. Después estuvimos toda la tarde haciendo castillos de arena. Fue algo soñado”.
“Lo que yo quiero transmitir es que todo es una experiencia, algo que para nosotros es común: ir a un restaurante, que te mimen, que la gente te esté esperando, un adulto que cuida, que promete cosas y cumple. Hay un chico que escribió ´gracias por cumplirme el sueño´ en la arena y es un poco eso, significar el rol del adulto que ellos no lo tuvieron”, explicó Marilina.
Luego de dos días en el Partido de La Costa, la voluntaria asegura que los recuerdos serán imborrables: “Ahora vas al hogar y te cuentan las mismas anécdotas 14 veces. Y que sean positivas. Es algo que nunca se olvidan”, remarcó.
El Hogar Nomadelfia aloja a niños que han sufrido vulnerabilidades de sus derechos. Se puede colaborar contactándose a través de su instagram @nomadelfiahogar.