El hecho sucedió cuando se encontraba trabajando cerca de la medianoche e inesperadamente, dos delincuentes armados y con sus rostros cubiertos irrumpieron en el lugar, redujeron a los cuatro empleados y por causas que aún se tratan de establecer le dispararon en el pecho a Carlos Palacios.
A pesar de estar gravemente herido, los delincuentes lo ataron al igual que sus compañeros, perpetraron el robo y se dieron a la fuga.
Según fuentes policiales, una vez que los delincuentes abandonaron el lugar, los empleados lograron zafarse de las amarras y llamaron a los bomberos. A pocos minutos llego la ambulancia y un móvil policial que trasladaron a Palacios, aún con vida al hospital donde murió más tarde.
La policía de Mar de Ajó que trabaja en la investigación del hecho indicó que se siguen varias líneas de investigación, una de ella apuntaría a ex empleados del lugar, ya que se especula que Palacio podría haber reconocido a los delincuentes.
El hecho ocurrió en Espora y Diagonal Urquiza.