En la costa bonaerense las especies más comunes de escualos son los bacota, escalandrún y cazón; pudiendo capturarse embarcado hacia el sur de la provincia en lugares como Bahía San Blas aunque también pueden lograrse algunos ejemplares en otras zonas (Punta Médanos, por ejemplo) pero con menor frecuencia.
BACOTA. Carcharhinus brachyurus (Gunther 1870)
Se lo puede identificar por su cuerpo medianamente robusto, hocico moderadamente largo, ojos circulares y moderadamente grandes, superficie dorsal gris bronceado u oliváceo, y superficie ventral blanca. Las aletas pueden presentar bordes y ápices oscuros inconspícuos. Es de distribución cosmopolita. En el Atlántico sudoccidental se lo ha registrado desde el sur de Brasil hasta Argentina.
Habita aguas someras hasta al menos 100 de profundidad. Los adultos no exceden los 300 cm de largo total. La máxima corresponde a un ejemplar hembra de 292 cm de largo total. La reproducción es vivípara. Los machos alcanzan la madurez sexual con una longitud que oscila entre 200 y 229 cm; las hembras maduran próximo a los 240 cm de largo total. Las crías, generalmente en camadas de 13 a 20, miden entre 57 y 69 cm de longitud al nacer. Su dieta incluye sardinas, bagres, merluzas, lenguados y otras especies de peces óseos, al igual que calamares, torpedos, peces sierra y pequeños tiburones del género Squalus.
ESCALANDRÚN. Carcharias taurus (Rafinesque 1810)
Se lo puede identificar por por sus dientes puntiagudos siempre visibles, hendiduras branquiales por delante del origen de las pectorales, superficie dorsal y flancos color marrón claro grisáceo, frecuentemente con manchas oscuras rojizas o marrones dispersas sobre el cuerpo, y superficie ventral blanca, sin manchas oscuras. Los adultos pueden alcanzar los 318 cm, pero en general no superan los 250 cm de longitud total. Las hembras son mayores que los machos; las hembras maduras miden al menos entre 120 y 300 cm, mientras que los machos maduros miden entre 220 y 257 cm.
Posee un nado poderoso pero suave, siendo más activo en horas nocturnas. Esta especie es más densa que el agua, pero retiene aire en su estómago para regular la flotabilidad. Han sido reportados tanto individuos solitarios como pequeñas a grandes agregaciones o cardúmenes. Es una especie altamente migratoria, desplazándose hacia mayores latitudes en el verano y en dirección ecuatorial en otoño e invierno. Su reproducción es ovovivípara; presenta ovofagia o canibalismo uterino y adelfofagia. Normalmente tiene dos crías por preñez, una en cada útero, y cado dos años. Sólo un embrión prevalece, devorando a sus hermanos antes del nacimiento. Cuando el embrión alcanza los 17 cm ya poseen dientes cortantes y funcionales, y a los 26 cm se desplazan nadando dentro del útero. La talla al nacer es de aproximadamente 100 cm. El período de gestación dura 8 a 9 meses. Preda sobre una amplia variedad de peces óseos, pequeños tiburones, chuchos, calamares, cangrejos y langostas.
CAZÓN (Galeorhinus galeus)
Caracteres externos distintivos: Cabeza con hocico prominente. Boca provista de dientes subtriangulares y cortantes. Cinco pares de aberturas branquiales laterales, las dos últimas ubicadas por encima de la base de los pectorales. Con aleta anal. Aleta dorsal primera situada muy por delante de las ventrales, la segunda a la altura de la anal. Cola tipicamente heterocerca, con un lóbulo en el extremo caudal y otro anteroinferior.
Coloración: Dorso gris plomizo uniforme, aclarándose en los flancos, vientre blanco.
Distinción de especies similares en el área: Se distingue de las especies del Género Mustelus (gatuzo, palomo) por el tipo de dientes: en el cazón se encuentran en varias hileras, de las cuales una sola es funcional, como en la mayoría de los tiburones, mientras que en las especies de Mustelus los dientes están dispuestos en mosaicos.
Tamaño: La talla máxima observada es de 155 cm. para las hembras y de 150 para los machos.
Otros datos Biológicos: Se alimentan de pequeños peces bentónicos (testolines) y pelágicos (pejerreyes, anchoíta, surel, palometa moteada). En menor medida, forman parte de la dieta cefalópodos (calamar, pulpo) y crustáceos (langostino).