A partir del testimonio de guardavidas, el rescate se produjo alrededor de las 17 Hs. luego que la víctima se quedara flotando cabeza abajo más tiempo de lo normal y fuera arrastrado por una corriente de resaca hacia una zona donde no podía valerse por si mismo. Ante la situación que estaba siendo observada, los guardavidas salen corriendo y a nado alcanzan a la persona para emprender la salida, que se dificultó por la corriente del momento, y realizarle las maniobras de RCP hasta que llegó la ambulancia.
«Los guardavidas hicieron todo lo posible como siempre, se angustiaron, nadaron con todas sus fuerzas, lo sujetaron y derivaron muy adentro por acción del mar. Vieron su estado y se esforzaron más. Tardaron lo menos que pueden tardar un par de brazos y un par de piernas. Pero eso fue mucho para alguien en ese estado», comentó un experimentado guardavidas.