En el marco de los festejos por su 90° aniversario, Villa Gesell dejó inaugurada oficialmente la temporada de verano con la ofrenda floral desde el muelle de pescadores, que este año cumplió 50 años.
En el inicio del acto, se realizó un minuto de silencio por la reciente partida de Rosemarie Gesell, hija del fundador, y por los guardavidas fallecidos.
Luego, el Párroco Pablo Bosisio realizó la bendición de las aguas, la ciudad, la temporada, los trabajadores y turistas, destacando el espíritu de los geselinos de “jugarse por los sueños y comprometerse para tener una Villa Gesell cada vez mejor”.
Por su parte, los Pastores Daniel Macri y Sarni también manifestaron sus deseos de empezar la temporada “con nuevas fuerza y nuevas esperanzas para creer que todo va a mejorar”.
El secretario de Turismo, Emiliano Felice, manifestó su “alegría y felicitaciones por los 90 años de Villa Gesell y destacó que la temporada ya empezó”, al señalar que los prestadores de servicios están trabajando desde octubre y expresó que “uno se emociona y se entusiasma porque sabemos que detrás de esta apertura hay trabajo y recuperación”. Felice también auguró “una temporada excepcional que será el puntapié de varias temporadas muy buenas”.
El acto también contó con la presentación del saxofonista Christian Cross, la entrega de reconocimientos a los guardavidas Gerardo Heitz y Daniel Scarpellino y un sentido aplauso para los guardavidas y ciudadanos ilustres Marcelo “Negro” Ojeda y Luis María “Rulo” Rivero.
El intendente Gustavo Barrera destacó el alto nivel de reservas para la temporada y llamó a “poner lo mejor de cada uno desde lo público para que la temporada sea lo mejor posible, es importante la colaboración de cada uno de los sectores para lograr el éxito del conjunto”.
Además, destacó que “parte del éxito de cada temporada son los guardavidas, esto es una gran comunidad, somos una gran familia y cuando vienen estos tiempos de trabajo todos tenemos que tener la camiseta de Villa Gesell para que salga lo mejor posible”.
El acto culminó con el tradicional salto de los guardavidas portando la ofrenda floral.