“Tuvo un percance con el padre en la orilla, tragó un poquito de agua y justo vino un turista a avisarme. Yo fui corriendo los 300 metros hacia donde se encontraban y cuando llegué me encontré que era un bebé de un año. Estaba inconsciente, no respondía. Para mi tuvo un paro respiratorio, así que lo asistimos muy rápidamente para mantenerlo con vida hasta que llegaran los médicos, que lo hicieron muy rápido por otra parte”, explicó Polli en AVC.
Relatando la intensa experiencia el guardavidas dijo “cuando llegué al lugar, pregunté qué había pasado porque tenía que saber y me dijeron que se había ahogado en la orilla, pero nadie sabía explicarlo bien. Los padres no estaban se habían ido a buscar ayuda desesperados. Estaba el tío con él. Ahí evalué según mi criterio lo que le pasaba al nene y sin dudarlo empecé a realizarle reanimación”.
“Estuve haciéndolo por 10 minutos más o menos hasta que llegó la ambulancia, pero a los 2 o 3 minutos el nene reaccionó. Ese fue el alivio más grande”, aseguró Polli.
“Yo creo que hubiera sido otro el desenlace si no le dábamos esa asistencia. Aunque es muy difícil de saber, pero ante la duda hay que accionar y trabajar. Creo que hice lo que tenía que hacer, simplemente eso”, finalizó.