En este marco se supo que, la empresa, a través de su propietario Gustavo Pereyra, está solicitando desde hacer varios meses atrás que la Municipalidad revea los mayores costos de la empresa.
De acuerdo a Pereyra, Ecoplata cobra el mismo monto desde 2012, sin que la comuna haya reconocido que los costos cambiaron. En la actualidad, la municipalidad abona unos 17 millones de pesos al año para realizar la recolección de residuos, mientras que Pereyra le reclama a la municipalidad una deuda de 28 millones de pesos, que parten de una variación de costos.
A raíz de la falta de actualización en el valor de la concesión, se produjeron demoras en el pago de los sueldos de los trabajadores, que conllevaron a medidas de fuerza por parte de los empleados.
La primera de ellas este año fue a fines de febrero, y en una señal de protesta, la semana pasada más precisamente en la mañana del martes, los empleados paralizaron el servicio hasta que se reunieron con el intendente Gustavo Barrera, quien les aseguró queabonaría lo que la Municipalidad adeudaba de abril y parte de marzo.
Esta situación de incertidumbre es la que motiva a Pereyra a anunciar que podría rescindir el contrato que tiene con la Municipalidad.
La licitación actual está en vigencia hasta el 2017 y para poder rescindir el contrato, Ecoplata deberá afrontar penalidades por incumplimiento del período.
Fuente: gesellaldia.com.ar